sábado, 31 de octubre de 2015

Esquizofrenia

La esquizofrenia es una enfermedad o un grupo de enfermedades que hace que los pacientes tengan dificultad  para reconocer lo que es real, controlar sus emociones, pensar con claridad, emitir juicios y comunicarse. L a esquizofrenia causa además un cambio mantenido en varios aspectos del funcionamiento psíquico del individuo, principalmente de la conciencia de realidad, y una desorganización neuropsicológica más o menos compleja, en especial de las funciones ejecutivas, que lleva a una dificultad para mantener conductas motivadas y dirigidas a metas, y una significativa disfunción social. Entre los síntomas frecuentes están las creencias falsas, un pensamiento poco definido o confuso, alucinaciones auditivas, reducción de las actividades de relación y de la expresión de emociones, e inactividad. Según la Organización Mundial de la Salud 52 millones de personas en el mundo sufren esquizofrenia, un trastorno psiquiátrico que se manifiesta de forma específica en cada paciente y que precisa un tratamiento individualizado.

El concepto de esquizofrenia tuvo un inicio histórico en el término: «demencia precoz» de Bénédict Morel a mediados del siglo XIX. En 1898 Emil Kraepelin deslindó dentro de la «demencia precoz» varios trastornos como la hebefrenia y la catatonia. Precisamente, debido a la posibilidad de múltiples combinaciones de síntomas, se ha sugerido que la esquizofrenia serían varios trastornos y no uno solo; por este motivo, Eugen Bleuler, cuando acuñó el nombre en 1908, prefirió usar el plural: schizophrenias para referirse a esta patología. A pesar de su etimología semejante, la esquizofrenia no es lo mismo que el trastorno de identidad disociativo (antes: «trastorno de personalidad múltiple», o de «doble personalidad»), con el que se la confunde frecuentemente.  Actualmente, el manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales distingue cinco variantes o subtipos dentro de la esquizofrenia, mientras que la Organización Mundial de la Salud distingue siete subtipos. Por otro lado, existe una amplia variedad de modelos categoriales y dimensionales que tratan de abordar y explorar los síntomas de la esquizofrenia y su diagnóstico

CAUSAS
La esquizofrenia es una enfermedad compleja. Los expertos en salud mental no están seguros de cuál es su causa. Es posible que influyan los genes.
Se presenta por igual en hombres y mujeres. Generalmente comienza en la adolescencia o en los primeros años de la adultez, pero puede empezar más tarde en la vida. Tiende a empezar más tarde en las mujeres y es una afección más leve.
La esquizofrenia en los niños por lo general comienza después de los 5 años de edad. Es poco común en la niñez y puede ser difícil diferenciarla de otros problemas del desarrollo, como el autismo.

Los síntomas de la esquizofrenia suelen comenzar en adultos jóvenes y aproximadamente 0,4-0,6 % de la población se ve afectada. El diagnóstico se basa en las experiencias que relatan el propio paciente y la conducta vista por el examinador. Se suele considerar que todo tipo de exploración o prueba psicométrica o de psicopatología precisa una información detallada de su alcance y objetivos, y la obtención previa de un consentimiento por parte del paciente. No existen actualmente pruebas de laboratorio diagnósticas de la esquizofrenia y ninguno de los síntomas es patognomónico o exclusivo de esta enfermedad, lo que dificulta el diagnóstico cierto.

En los pacientes esquizofrénicos, se ha detectado disfunción de los sistemas de neurotransmisores y anomalías anatómicas cerebrales, así como anormalidades del sistema inmunitario. No obstante, no se conocen con certeza las causas de la esquizofrenia. Los estudios sugieren que los principales factores de riesgo son la predisposición genética y factores perinatales. Además, algunas circunstancias socio-ambientales, el aumento de la edad de los padres, 8 ciertos medicamentos y el uso recreativo de drogas  parecen provocar o empeorar los síntomas. En un subgrupo de pacientes esquizofrénicos, la enfermedad celíaca o una anomalía en la absorción intestinal, podrían ser causantes del desarrollo de la esquizofrenia.

Se puede considerar que la esquizofrenia es una de las enfermedades más complejas y que más sufrimiento causa no solo a los pacientes sino también a sus familiares, es una enfermedad grave e incapacitante que sigue un curso crónico.
Se caracterizan por la aparición a veces brusca y otras no tanto de un deterioro en el pensamiento, lenguaje, sentimientos o habilidades sociales que en la mayoría de los casos aparece en el contexto que de lo que se denomina como un “síndrome psicótico” que se caracteriza por la aparición de alucinaciones, delirios y comportamiento extravagante.

El enfermo cree que su pensamiento, sentimientos y actos son conocidos o compartidos por otros y pueden presentarse ideas delirantes en torno a la existencia de fuerzas naturales o sobrenaturales capaces de influir en sus actos o pensamientos. Son frecuentes las alucinaciones, especialmente auditivas, que pueden comentar la propia conducta o los pensamientos propios del enfermo. Suelen presentarse además otros trastornos de la percepción: los colores o sonidos pueden parecer excesivamente vividos o tener sus cualidades y características alteradas y detalles irrelevantes de hechos cotidianos pueden parecer más importantes que la situación u objeto principal. La perplejidad es frecuente ya desde el comienzo, la cual suele acompañarse de la creencia de que las situaciones cotidianas tienen un significado especial, por lo que general siniestro y dirigido contra el propio enfermo.

CLASIFICACIÓN

Los tipos de esquizofrenia están definidos por los síntomas que predominan en la evaluación del paciente con esquizofrenia y es frecuente que el cuadro incluya síntomas que son característicos de más de un subtipo según el DSM-IV:

• Esquizofrenia paranoide: La característica principal del tipo paranoide de esquizofrenia consiste en la presencia de claras ideas delirantes y alucinaciones auditivas sin claras alteraciones en la afectividad, en el lenguaje y sin mostrar un comportamiento catatónico asociado. Fundamentalmente, las ideas delirantes son de persecución, de perjuicio o ambas, pero también puede presentarse ideas delirantes con otra temática aunque suelen estar organizadas alrededor de un tema coherente. También es habitual que las alucinaciones estén relacionadas con el contenido de la temática delirante. Los síntomas asociados incluyen ansiedad, ira, retraimiento y tendencia a discutir. El inicio tiende a ser más tardío que en otros tipos de esquizofrenia y las características distintivas pueden ser más estables en el tiempo.

• Esquizofrenia desorganizada: Las características principales del tipo desorganizado de esquizofrenia son el lenguaje desorganizado, el comportamiento desorganizado y unas alteraciones en las emociones marcadas. Puede haber ideas delirantes y alucinaciones, pero están no suelen están organizadas en torno a un tema coherente. Las características asociadas incluyen muecas, manierismos y otras rarezas del comportamiento. Habitualmente, este subtipo está asociado a un inicio temprano y a un curso continuo. Históricamente, y en otros sistemas clasificatorios, este tipo se denomina hebefrénico.

• Esquizofrenia catatónica: La característica principal del tipo catatónico de esquizofrenia es una marcada alteración psicomotora que puede incluir inmovilidad, actividad motora excesiva, negativismo extremo, mutismo o peculiaridades del movimiento voluntario. Aparentemente, la actividad motora excesiva carece de propósito y no está influida por estímulos externos. Puede haber desde el mantenimiento de una postura rígida en contra de cualquier intento de ser movido hasta una adopción de posturas raras o inapropiadas. Para diagnosticar este subtipo, el cuadro debe cumplir en primer lugar todos los criterios para la esquizofrenia y no ser más explicable por otras causas u enfermedades.

 Esquizofrenia residual: El tipo residual de esquizofrenia debe utilizarse cuando ha habido al menos un episodio de esquizofrenia, pero en el cuadro clínico actual no es acusada la existencia de ideas delirantes, alucinaciones, comportamiento o un lenguaje desorganizados, sobresaliendo principalmente los síntomas negativos (aislamiento emocional, social, pobreza del lenguaje, falta de interés..).

 Esquizofrenia indiferenciada: cuando una esquizofrenia no reúne los criterios de los subtipos anteriores o presenta varios de ellos se le llama indiferenciada. 

Criterios de clasificación de la esquizofrenia según la CIE-10
La CIE-10, como el DSM-IV-TR, plantea que no hay síntomas patognomónicos, pero sí que ciertos fenómenos psicopatológicos que suelen presentarse asociados entre sí tienen una significación especial para el diagnóstico de esquizofrenia. Éstos son:


  1. Eco, robo, inserción del pensamiento o difusión del mismo.
  2. Ideas delirantes de ser controlado, de influencia o de pasividad, claramente referidas al cuerpo, a los movimientos de los miembros o a pensamientos, acciones o sensaciones concretas y percepción delirante.
  3. Ideas delirantes persistentes de otro tipo que no son adecuadas a la cultura del individuo o que son completamente imposibles, tales como la identidad religiosa o política, la capacidad y los poderes sobrehumanos (por ejemplo, ser capaz de controlar el clima, estar en comunicación con seres de otros mundos).
  4. Alucinaciones persistentes de cualquier modalidad cuando se acompañan de ideas delirantes no estructuradas y fugaces sin contenido afectivo claro, o ideas sobrevaloradas persistentes o cuando se presentan a diario, durante semanas, meses o permanentemente.
  5. Interpolaciones o bloqueos en el curso del pensamiento, que dan lugar a un lenguaje divagador, disgregado, incoherente o lleno de neologismos.
  6. Manifestaciones catatónicas tales como excitación, posturas características o flexibilidad cérea, negativismo, mutismo, estupor.
  7. Síntomas «negativos» tales como apatía marcada, empobrecimiento del lenguaje, bloqueo o incongruencia de la respuesta emocional (éstos habitualmente conducen a retraimiento social y disminución de la competencia social). Debe quedar claro que estos síntomas no se deban a depresión o a medicación neuroléptica.
  8. Un cambio consistente y significativo de la calidad general de algunos aspectos de la conducta personal, que se manifiesta como pérdida de interés, falta de objetivos, ociosidad, estar absorto y aislamiento social.
• Pautas para el diagnóstico según la CIE-10: el requisito habitual para el diagnóstico de esquizofrenia es la presencia como mínimo de un síntoma muy evidente, o dos o más si son menos evidentes, de cualquiera de los grupos de uno a cuatro; o síntomas de por lo menos dos de los grupos referidos entre el cinco y el ocho, que hayan estado claramente presentes la mayor parte del tiempo durante un período de un mes o más. Los cuadros que reúnan otras pautas pero de una duración menor a un mes (hayan sido tratados o no) deberán ser diagnosticados en primera instancia como trastorno psicótico agudo de tipo esquizofrénico y reclasificados como esquizofrenia si el trastorno persiste por un período de tiempo más largo. El primer síntoma de la lista precedente se aplica sólo a la esquizofrenia simple y requiere, por lo menos, una duración de un año.

• Formas de evolución según la CIE-10: continua; episódica con defecto progresivo; episódica con defecto estable; episódica con remisiones completas; remisión incompleta; otra forma de evolución; forma de evolución indeterminada, período de observación demasiado breve.

• Subtipos de evolución según la CIE-10: esquizofrenia paranoide, esquizofrenia hebefrénica, esquizofrenia catatónica, esquizofrenia indiferenciada, depresión postesquizofrénica, esquizofrenia residual, esquizofrenia simple, otra esquizofrenia, esquizofrenia sin especificación.

La Organización Mundial de la Salud reconoce además los tipos:

  1.  Depresión post-esquizofrénica: trastorno de tipo depresivo, a veces prolongado, que surge después de un trastorno esquizofrénico. Durante él pueden persistir algunos síntomas esquizofrénicos, pero no predominan en el cuadro clínico. Raramente tienen tanta importancia como para realizar un diagnóstico de depresión grave (Requiere un mínimo de dos semanas de afectación funcional y anímica notorias).
  2. Esquizofrenia simple: su desarrollo es insidioso, no manifiesta alucinaciones ni delirios, es menos psicótica y muestra fundamentalmente síntomas negativos.

MORTALIDAD

Se sabe que la esquizofrenia es una de las principales causas de discapacidad. En un estudio de 1999 de 14 países, la psicosis activa ocupa el tercer lugar después de la parálisis cerebral y la demencia, y por delante de la paraplejía y la ceguera
Las personas con esquizofrenia tienen un riesgo de suicidio del 10 %. La mortalidad también aumenta a causa de enfermedades médicas, debido a una combinación de estilos de vida poco saludables, los efectos secundarios de la medicación, y una baja calidad de atención sanitaria. Debido a estos factores, la esperanza de vida de estos pacientes es de 10 a 12 años inferior a la de la población sana. 


SINTOMAS

Los síntomas generalmente se van presentando lentamente a lo largo de meses o años. La persona puede tener muchos síntomas, o solo algunos.
Las personas con esquizofrenia pueden tener dificultad para conservar amigos y para trabajar. También pueden tener problemas de ansiedad, depresión y pensamientos o comportamientos suicidas.
Los síntomas iniciales pueden incluir:

  • Sentirse irritable o tenso
  • Dificultad para concentrarse
  • Dificultad para dormir
A medida que la enfermedad continúa, la persona puede tener problemas con el pensamiento, las emociones y el comportamiento, como:

  • Escuchar o ver cosas que no existen (alucinaciones)
  • Aislamiento
  • Disminución de la emoción
  • Problemas para prestar atención
  • Creencias fuertemente sostenidas que no son reales (delirios)
  • Hablar de una forma que no tiene sentido
  • Los pensamientos que "saltan" entre diferentes temas ("asociaciones sueltas")

Clasificación y agrupación de los síntomas psicóticos

Además de las clasificaciones expuestas, es de uso habitual una clasificación y agrupación de los síntomas en tres categorías sintomáticas: síntomas positivos (delirios y alucinaciones), síntomas negativos (afecto aplanado, alogia, abolición/apatía y dificultades de atención) y síntomas de «desorganización» (que incluyen habla desorganizada, trastorno del pensamiento, conducta desorganizada y falta de atención). Si bien los síntomas positivos son los más relevantes en las fases agudas de los trastornos, los síntomas determinantes en las disfunciones sociales y ocupacionales de los pacientes con esquizofrenia son los síntomas negativos y los déficits cognitivos. Los síntomas negativos y los déficits cognitivos son extremadamente importantes, tanto clínicamente como en términos de rehabilitación, pues afectan a la capacidad de trabajo, a las relaciones con los demás y a los lazos emocionales, es decir, a la capacidad del paciente para desarrollar una vida en condiciones normales.

SÍNTOMAS MÁS IMPORTANTES

La esquizofrenia se caracteriza por una mezcla de signos y síntomas, aunque no necesariamente todos tengan que estar presentes. Para diagnosticar la enfermedad es necesario que aparezcan varios síntomas, durante un periodo de tiempo que puede oscilar entre uno y seis meses y que además produzca un deterioro importante en el funcionamiento del paciente, en su trabajo y en sus relaciones personales.
Tradicionalmente los síntomas de la esquizofrenia se han clasificado como positivos y negativos, pero el patrón puede variar. Un paciente puede escuchar voces y sentirse perseguido, mientras que en otros casos pueden ser más desorganizado, hablar incoherentemente, puede estar agitado o tener un comportamiento extraño.
Mientras que los síntomas positivos  de la esquizofrenia a menudo son muy llamativos y hacen notar la enfermedad del paciente, los síntomas negativos suelen afectar más a su capacidad de funcionar en la vida diaria, impidiéndoles tener relaciones familiares normales, asistir a la escuela, mantener un trabajo, o desarrollar amistades y relacione síntomas.

Dentro  de los síntomas positivos destacan las alucinaciones que son alteraciones en la percepción (es decir, escuchar voces sin que haya nadie hablando); las ideas delirantes  que son alteraciones del proceso de pensamiento (es decir; malinterpretar información, a menudo en una forma que indica  peligro o daño)
Las ideas delirantes que son creencias falsas pero de las que el enfermo está firmemente convencido, a pesar de no poseer pruebas concretas. Las personas que experimentan delirios creen que son perseguidas, que tienen poderes o talentos especiales o que su pensamiento o acciones están bajo el control de una fuerza extraña.
Las alucinaciones son alteraciones de la percepción, las más habituales en la esquizofrenia son las auditivas, en forma de voces imaginarias. Algunas veces,  los enfermos mantienen conversaciones con ellas. Las voces pueden darles órdenes o comentar el carácter y las acciones de la persona con esquizofrenia. Otras alucinaciones menos frecuentes consisten en ver, sentir, saborear u oler cosas que no existen y que son percibidas como reales.
Los enfermos que sufren trastornos del pensamiento tienen una forma de pensar confundida, que se manifiesta en el contenido y en la forma de lo que dicen. La conversación resulta difícil de seguir, ya que salta de un tema a otro con poca o ninguna conexión lógica. También se producen interrupciones en el hilo del pensamiento (bloqueo de pensamiento). En algunos casos, los pacientes creen que sus pensamientos están siendo difundidos o robados o controlados o impuestos por agentes externos, por ejemplo, un extraño o un demonio. Estos fenómenos reciben el nombre de eco, difusión, inserción o robo del pensamiento. A veces la manera de hablar se vuelve extraña, de manera que solo tiene sentido para quien habla. En los casos más graves, el lenguaje, suele ser tan confuso e inconexo que es imposible entenderlo.

Hay que tener en cuenta que las ideas delirantes y las alucinaciones no justifican necesariamente el diagnostico de esquizofrenia. Estos mismos síntomas se dan en personas que abusan del alcohol o de las drogas o que sufren depresión grave, manía, daño cerebral y otras enfermedades.
A diferencia de los síntomas positivos, los negativos constituyen alteraciones más sutiles del funcionamiento y muchas veces no se reconocen como síntomas de la enfermedad. En ocasiones, los familiares u otras personas los interpretan erróneamente como signos de pereza.
También la esquizofrenia reduce la motivación de las personas y disminuye su capacidad de trabajar o de participar en diversiones. Se interesan poco por actividades cotidianas y en algunos casos descuidan su higiene personal y la propia alimentación. Surge en ellos indecisión, negativismo y pasividad, mezclados con impulsos súbditos.
A veces las personas que padecen esquizofrenia tiene u un estado emocional embotado, de manera que no responden a lo que pasa a su alrededor. Son incapacidades de reflejar cambios emocionales en su expresión facial, en sus gestos o en el tono de su voz y de no responder a acontecimientos felices o tristes, o bien, de reaccionar de forma inadecuada.

CLASIFICACIÓN DE LOS SÍNTOMAS

Síntomas negativos
Los síntomas negativos, o «síndrome de actividad psicomotriz disminuida», consisten en la deficiencia de movimientos espontáneos, el habla y falta de interés. Dicho de otra forma, por lo general se consideran como una pérdida o disminución de funciones psicomotoras que incluyen al afecto embotado o plano, apatía, alogia (limitación en la fluidez y productividad del habla), abulia y anhedonia.

Síntomas positivos
Los síntomas positivos, o «síndrome de distorsión de la realidad», consisten en alucinaciones y delirios. También estos síntomas en general reciben el nombre de «psicosis».

Kurt Schneider distinguió diferencias entre la esquizofrenia y otros trastornos que pueden producir psicosis como la depresión, manía, psicosis reactivas y otros. Schneider identificó y dividió en dos grupos once síntomas, siete caracterizados por una extraña sensación de invasión proveniente del exterior y cuatro en alucinaciones auditivas y difusión del pensamiento:

Síntomas schneiderianos
Sensación de invasión del exterior:

1.    Percepción delirante.
2.    Experiencias de pasividad somática
3.    Pensamientos de salida del cuerpo
4.    Inserción de los pensamientos
5.    Imposición de los sentimientos
6.    Imposición de los impulsos
7.    Imposición de los actos voluntarios

Alucinaciones auditivas:

  1. Audición del pensamiento
  2. Voces que comentan las acciones propias
  3. Voces que discuten
  4. Difusión del pensamiento

Evolución natural
La esquizofrenia se presenta en diferentes fases o episodios críticos agudos con tiempos de evolución variables —desde algunas semanas hasta varios meses, dependiendo del tratamiento— y diferentes modos de resolución y síntomas residuales, que constituyen la esquizofrenia crónica.

Fase premórbida y prodrómica
Lieberman considera una evolución más o menos típica, que se inicia con una fase premórbida entre el nacimiento y los 10 años. Luego existe un período prodrómico,  entre los 10 y los 20 años que puede durar unos 30 meses. En este período y antes de la aparición de la psicosis propiamente dicha suele aparecer alguna sintomatología negativa y se interrumpe el funcionamiento normal del individuo. Por ejemplo, abandona la escuela o no logra iniciar un noviazgo,  descuido en el vestir e higiene personal. Los pacientes con marcadas anormalidades estructurales en el cerebro suelen tener un comienzo temprano, anterior al de los síntomas psicóticos.

Fase de progresión
Después de la primera fase prodrómica comienza el período de 1 a 6 meses, caracterizado por progresión del trastorno, donde aparecen los primeros episodios agudos con los síntomas más llamativos, mayormente síntomas positivos como delirios y alucinaciones,  aunque no son éstos los más importantes para realizar el diagnóstico. Los síntomas aparecen en brotes con exacerbaciones y remisiones parciales, y frecuentemente acompañados de un deterioro progresivo. Con frecuencia, al salir de los síntomas psicóticos, aparece la depresión, que puede conllevar a ideas e intentos suicidas.
Un episodio que se inicia con gran intensidad de síntomas positivos (por ejemplo, intenso delirio, alucinaciones, agitación psicomotora, lo que se conoce como un «episodio florido» y en forma más o menos brusca), tiene mejor pronóstico que una presentación insidiosa y con síntomas negativos como la desorganización más que el delirio.
Sea que se presente de manera florida o insidiosa, los pacientes muy raramente van a solicitar ayuda. Con frecuencia serán las personas con las que viven o trabajan las que van a solicitarla, motivados por la observación de una serie de conductas extrañas o que perciben como amenazadoras. A pesar de que las intervenciones familiares han demostrado su eficacia en la disminución de recaídas psicóticas, mejorar el clima familiar y el funcionamiento social, siguen sin tener una implantación suficiente en la atención habitual del paciente esquizofrénico. La realidad es que sólo una minoría de las familias que tienen contacto con pacientes esquizofrénicos han recibido apoyo e información sobre la enfermedad.

Las conductas del paciente que parecen más extrañas (como hablar solo, por ejemplo) en realidad responden a vivencias psicóticas actuales, como contestarle a voces que está escuchando. También pueden gritarle a las personas de manera incomprensible o gritar obscenidades en público, que podría estar en realidad respondiendo a un delirio de persecución o daño. A la larga, el deterioro social del paciente parece estar más relacionado con el compromiso de funciones cognitivas, tales como el abandono, descuido y desaseo personal, y no tanto con los síntomas propiamente psicóticos positivos, como las alucinaciones y delirios.
Si el paciente no se recupera por completo, con o sin tratamiento, aparece la enfermedad recidiva, es decir, de forma repetida con o sin recuperación completa cada vez. A los 5 años en tratamiento continuo, solo el 20 % de los pacientes no presentan recidiva.

Fase de recidivas estables
Por último viene el período de estabilización, residual y/o agotamiento, aproximadamente sobre los 40 años de edad, en el que predomina la sintomatología negativa y los déficits cognitivos (aunque estos ya están presentes desde el inicio del trastorno),es decir, con el paso del tiempo la esquizofrenia puede comprometer más o menos profundamente a la persona, lo que se conoce como esquizofrenia crónica. Sobre ésta pueden aparecer nuevos episodios de reagudización, con síntomas característicos de los episodios agudos, pero al salir normalmente se retorna a niveles de recuperación previos a las recidivas

DIAGNOSTICO
Para diagnosticar la esquizofrenia un especialista en salud mental (psiquiatra o psicólogo) debe realizar un estudio clínico de los síntomas que padece el paciente desde hace algún tiempo, una vez el médico de familia lo haya derivado. Además, se realizarán pruebas de laboratorio y/o complementarias para descartar otras enfermedades o el uso de sustancias tóxicas.

Es importante que la persona afectada explique todos los cambios que está sufriendo, a fin de que el especialista pueda realizar un diagnóstico adecuado.
El diagnóstico de la esquizofrenia se realiza a través de la historia clínica del paciente, donde se reflejan tanto los antecedentes familiares como los acontecimientos sufridos por el paciente y los tratamientos prescritos, así como una entrevista a las personas que forman parte del entorno del paciente. El diagnóstico de la esquizofrenia se basa en criterios clínicos reforzados por pruebas psicométricas, neuropsicológicas y, en determinados casos y como complemento al diagnóstico, se emplean pruebas  de neuroimagen.

La esquizofrenia no suele ser de aparición súbita, sino que suele desencadenarse con un primer periodo cuya duración oscila entre varios días y años, en los cuales el paciente, progresivamente, presenta cambios mínimos de carácter, disminución en el rendimiento escolar/laboral, aumento de la ansiedad y, finalmente, aislamiento social.
En la aparición del primer episodio psicótico suelen predominar de forma clara los síntomas de tipo positivo, aunque en determinados tipos de esquizofrenia estos síntomas están disminuidos o ausentes. Tras este primer episodio, el paciente suele precisar hospitalización, donde se realiza un primer diagnóstico y se establece el tratamiento, que el paciente deberá seguir de forma rigurosa durante al menos dos años. Los factores que pueden considerarse favorables al pronóstico de la enfermedad son:

  • Aparición tardía de la enfermedad.
  • Buena adaptación y seguimiento del tratamiento.
  • Ritmo de vida estable, con horarios de trabajo y descanso fijos, y evitando el  consumo de cualquier tipo de droga (alcohol, tabaco,…).
  • Ausencia de antecedentes familiares de trastornos afectivos y de alteraciones neuroestructurales en el propio paciente.
  • Buenos resultados en las pruebas neuropsicológicas.
Se consideran con mejor pronóstico las esquizofrenias paranoides, y en las pacientes femeninas mejor que en los varones. Por el contrario, son signos que alertan del riesgo de recaída:

  • Alteraciones del comportamiento.
  • Insomnio.
  • Sensación de abatimiento y decaimiento (depresión).
  • Dificultad de concentración.
  • Irritabilidad y/o agresividad.
  • Bloqueo.

¿Se puede hacer prevención?

Las primeras señales de cambios en el comportamiento habitual pueden alertar de que alguna cosa no va bien y se puede pedir ayuda a los profesionales de la salud. En estos momentos, es importante que se realice un diagnóstico precoz del trastorno.
Potenciar los recursos personales, aumentar la tolerancia al estrés, disminuir los factores de tensión psicosocial, mejorar las habilidades para relacionarse... son, junto con tener un buen vínculo terapéutico que permita implementar el tratamiento oportuno, los principales elementos de prevención de la aparición de una crisis.
Esta prevención se incrementa si se mantiene un estilo de vida saludable y estable, y se potencian las capacidades personales y el autocuidado. Hay que fomentar este tipo de factores preventivos del trastorno, así como evitar otros que podrían indicar un mayor riesgo de desestabilización (situaciones de estrés, abandono de la medicación, consumo de drogas, etc.).

TRATAMIENTO
Las perspectivas de tratamiento de los pacientes con esquizofrenia han mejora notablemente gracias al desarrollo de una serie de medicamentos e intervenciones psicosociales.
Hoy en día se han emprendido nuevas investigaciones para encontrar tratamientos más inocuos e eficaces., tres son los componentes principales que conforman el tratamiento de la esquizofrenia:
Fármacos para aliviar los síntomas y evitar las recidivas. Los nuevos fármacos antipsicóticos controlan mejor los síntomas del trastorno, al tiempo que tienen menos efectos secundarios estigmatizante.
Enseñanza e intervenciones psicosociales, para ayudar a los pacientes y a sus familiares a resolver problemas, hacer frente al estrés, afrontar la enfermedad y sus complicaciones y prevenir las recaídas.
Rehabilitación social,  para ayudar a los pacientes a reintegrarse en la comunidad y recuperar la actividad educativa y laboral.}
Las psico-educación y otras intervenciones psicosociales ayudan al paciente  y a sus familiares a manejar el trastorno de manera más efectiva, a reducir la disfunción social y laboral y a conseguir la reintegración social.

Intervención farmacológica
Los tratamientos farmacológicos son un elemento habitualmente indispensable tanto en el tratamiento de los pacientes con esquizofrenia como en los primeros episodios psicóticos. Las medicaciones se utilizan para el tratamiento de los episodios agudos, para la prevención de futuros episodios y para la mejoría de los síntomas entre episodios. Los fármacos antipsicóticos son el principal tratamiento farmacológico de estos pacientes. Sin embargo, otros medicamentos, como los estabilizantes del estado de ánimo y otras medicaciones coadyuvantes, también resultan útiles en determinados subgrupos de pacientes.

 Medicaciones antipsicóticas
La medicación principal en el tratamiento de la esquizofrenia y otros trastornos psicóticos está constituida por los fármacos antipsicóticos, introducidos en la práctica clínica desde los años cincuenta del pasado siglo. Por sus características, efectos sobre los síntomas psicóticos y por sus perfiles de efectos adversos, se los ha clasificado en dos grandes grupos: antipsicóticos de primera generación o convencionales, y antipsicóticos de segunda generación o atípicos.


A) Antipsicóticos de primera generación (o convencionales)
Los fármacos antipsicóticos de primera generación agrupan a un conjunto de especialidades farmacéuticas que se caracterizan por actuar frente a los síntomas psicóticos. Los actualmente autorizados en el Estado español son los siguientes: clorpromazina, clotiapina, haloperidol, levomepromazina, perfenazina, periciazina, pimozida, sulpirida, tioproperazina, trifluoperazina y zuclopentixol.
Se clasifican en tres grupos según su potencia antipsicótica: a) alta potencia (como haloperidol); b) potencia intermedia (como perfenazina); c) baja potencia (como clorpromazina).
Son eficaces para reducir la mayor parte de los síntomas positivos de la esquizofrenia (alucinaciones, delirios, conductas extrañas), y en menor medida los síntomas negativos (apatía, embotamiento afectivo, alogia, abulia), frente a los que son relativamente ineficaces.
Poseen un margen terapéutico de seguridad muy elevado por lo que las sobredosis raras vez son mortales si no se complican con problemas médicos preexistentes o por el consumo simultáneo de alcohol u otras medicaciones. En caso de sobredosis, la depresión respiratoria y la hipotensión son las que presentan mayor riesgo.
Se pueden utilizar en forma oral, intramuscular de acción rápida o en depot de acción prolongada; la preparación intramuscular de acción breve es la que alcanza antes la concentración máxima.

Efectos adversos de los antipsicóticos de primera generación (o convencionales)
A continuación, se expone de forma individualizada una serie de efectos adversos según las recoge la GPC de la APA:


Sedación
La sedación es un efecto secundario muy común de los antipsicóticos de primera generación. Este efecto puede estar relacionado con efectos antagonistas de estos fármacos sobre los receptores histaminérgicos, adrenérgicos y dopaminérgicos.
La sedación es más pronunciada en las fases iniciales del tratamiento, ya que con la administración continuada de estos fármacos la mayoría de pacientes desarrolla cierta tolerancia a los efectos sedantes. En el caso de los pacientes agitados, es posible que los efectos sedantes de estos fármacos en la fase inicial del tratamiento tengan alguna ventaja terapéutica. La sedación persistente, como la somnolencia diurna y pasar más horas durmiendo, pueden interferir con la función social, recreativa y laboral. La reducción de la dosis diaria, la consolidación de dosis separadas en una dosis nocturna o el cambio a un fármaco antipsicótico menos sedante puede ser eficaz para reducir la gravedad de la sedación.

Efectos neurológicos. Efectos adversos extrapiramidales
Los efectos adversos neurológicos son: efectos adversos extrapiramidales agudos, como parkinsonismo inducido por medicación, distonía y acatisia; efectos adversos extrapiramidales crónicos, como la discinesia y la distonía tardías, y el síndrome neuroléptico maligno. 

Los efectos adversos extrapiramidales agudos son signos y síntomas que aparecen durante los primeros días y semanas de la administración de medicamentos antipsicóticos, son dependientes de la dosis y reversibles si se reduce la dosis del fármaco o se interrumpe por completo su administración.
Los efectos adversos extrapiramidales crónicos son signos y síntomas que aparecen al cabo de meses y años de la administración de medicamentos antipsicóticos, no dependen tan claramente de la dosis y pueden persistir tras la retirada del medicamento.
Más del 60% de los pacientes que reciben un tratamiento intensivo con antipsicótico de primera generación manifiestan algún tipo de efectos adversos extrapiramidales clínicamente significativos.

El parkinsonismo inducido por medicamentos se caracteriza por la presencia de los síntomas de la enfermedad idiopática de Parkinson (rigidez, temblores, acinesia y bradicinesia) y es la forma más frecuente de manifestación de efectos adversos extrapiramidales. Estos síntomas se originan durante los primeros días y semanas de la administración de medicamentos antipsicóticos y son dependientes de la dosis.
La acinesia o la bradicinesia son características del parkinsonismo inducido por medicación que afecta tanto a la función motora como a la cognitiva.
En los pacientes con acinesia también pueden observarse síntomas depresivos; se trata de la denominada «depresión acinética». 

La distonía aguda se caracteriza por la contracción espástica de grupos musculares aislados. Las reacciones distónicas se dan en un 10% de los pacientes que inician tratamiento.
Los factores de riesgo son la juventud del paciente, el sexo masculino, el empleo de medicaciones de alta potencia, las dosis altas y la administración intramuscular. Se produce con frecuencia después de las primeras dosis de medicación y en un 90% en los tres primeros días.
Puede afectar a diversas regiones del cuerpo, pero aquejan con mayor frecuencia a los músculos del cuello, la laringe, los ojos y el torso; se utilizan los términos «torticolis», «laringoespasmo», «crisis oculógira» y «opistótonos» para describir las reacciones distónicas de regiones corporales concretas. Estas reacciones tienen un inicio repentino y causan un gran malestar. En algunos pacientes, estas afecciones, por ejemplo el laringoespasmo, pueden ser peligrosas e incluso poner la vida en peligro.
Responden rápidamente a la administración de medicación anticolinérgica o antihistamínica. La administración por vía parenteral tiene un inicio más rápido que la administración oral, posteriormente se puede mantener una pauta oral de medicación antiparkinsoniana anticolinérgica para prevenir las recidivas.

La acatisia se caracteriza por una agitación somática, que se manifiesta de forma subjetiva y objetiva en un 30% de los pacientes tratados con antipsicóticos de primera generación, y es menos frecuente con los de baja potencia.
Los pacientes suelen referir una sensación interna de agitación y una necesidad irresistible de mover diversas partes del cuerpo.
En la acatisia leve, el paciente puede controlar los movimientos corporales, pero en formas más graves no deja de andar mientras está de pie y es incapaz de permanecer sentado. Este efecto secundario es a menudo muy molesto y una causa frecuente de incumplimiento del tratamiento antipsicótico; si no se impide que persista, puede producir disforia. También puede contribuir al comportamiento agresivo o suicida.
Entre los tratamientos eficaces para la acatisia destacan los β-bloqueantes de acción central, propranolol (30-90 mg/día). Cuando se administren estos medicamentos, es conveniente controlar la presión sanguínea y el pulso con las distintas dosis.

El síndrome neuroléptico maligno se caracteriza por una tríada de características: rigidez, hipertermia e inestabilidad autónoma, incluidas la hipertensión y la taquicardia. Se relaciona con una elevación de la concentración sérica de la creatina-cinasa.
La prevalencia es de menos del 1% de los pacientes tratados, y el diagnóstico se pasa por alto con cierta frecuencia y puede ser mortal en el 5-20% de los pacientes sin tratar.
Su inicio puede ser repentino, a menudo en la primera semana o tras haber aumentado la dosis.
Los factores de riesgo son: agitación aguda, juventud, sexo masculino, incapacidad neurológica previa, enfermedad física, deshidratación, aumento rápido de la dosis de antipsicótico, administración de fármacos de alta potencia y de preparados intramusculares.
Siempre debería interrumpirse el tratamiento con antipsicóticos y debería proporcionarse tratamiento de apoyo para mantener la hidratación y tratar la fiebre, así como los síntomas cardiovasculares, renales y otros.
Para su tratamiento se requiere, en la mayoría de los casos, el ingreso hospitalario.

La discinesia tardía es un trastorno de movimientos involuntarios anormales hipercinéticos causado por la exposición mantenida a la medicación antipsicótica. Puede afectar a la función neuromuscular en cualquier región del cuerpo, pero se observa especialmente en la región orofacial.
La propia esquizofrenia puede asociarse a un riesgo de discinesia espontánea que es indistinguible de la inducida por medicación.
La discinesia tardía aparece en un porcentaje anual del 4 al 8% en pacientes adultos tratados con este tipo de antipsicóticos.
Los factores de riesgo son: edad avanzada, los síntomas parkinsonianos inducidos por antipsicóticos, sexo femenino combinado con estado posmenopáusico, el diagnóstico de trastorno afectivo (trastorno depresivo mayor), enfermedades médicas simultáneas (diabetes) y el empleo de dosis altas de medicación antipsicótica.
La mayoría de pacientes tienen síntomas leves pero un 10% sufren síntomas de carácter moderado o intenso. Una variante frecuente y grave de la discinesia tardía es la distonía tardía, que se caracteriza por la aparición de contracciones musculares espásticas en lugar de movimientos coreoatetósicos. La distonía tardía a menudo se relaciona con un mayor malestar y sensación de incomodidad física.

Efectos anticolinérgicos y antiadrenérgicos
Los efectos adversos de los antipsicóticos de primera generación (y, en caso de administrarlos conjuntamente, junto con los efectos anticolinérgicos de los antiparkinsonianos) pueden producir una variedad de efectos adversos periféricos, como sequedad de boca, visión borrosa, estreñimiento, taquicardia, retención urinaria y efectos termorreguladores. Los efectos adversos anticolinérgicos pueden aparecer en un 10-50% de los pacientes tratados. Cabe señalar que se han observado más efectos anticolinérgicos con el uso de clorpromazina que con el de haloperidol.
Aunque la mayor parte de efectos adversos anticolinérgicos son leves y tolerables, este tipo de efectos puede ser particularmente problemático en los pacientes de edad (p. ej. hombre de edad con hipertrofia prostática). Las condiciones de los efectos anticolinérgicos son graves sólo en muy pocos casos.
Los efectos anticolinérgicos son alteraciones del aprendizaje y la memoria, y un enlentecimiento de la cognición. Los síntomas de toxicidad anticolinérgica son la confusión, el delirio, la somnolencia y las alucinaciones. Es más probable que estos síntomas aparezcan con fármacos cuyos efectos anticolinérgicos son más potentes, o debido a la administración de fármacos antiparkinsonianos anticolinérgicos, y también en pacientes ancianos o médicamente debilitados.

Otros efectos adversos


Convulsiones: Los antipsicóticos de primera generación pueden reducir el umbral de convulsión y originar la aparición de convulsiones tonicoclónicas generalizadas. La baja potencia de estos antipsicóticos se asocia con un riesgo mayor. En el caso de los antipsicóticos de baja potencia, la frecuencia de las convulsiones se relaciona con las dosis, y las dosis más altas están asociadas a un riesgo mayor. A las dosis habituales, el porcentaje de convulsiones es inferior al 1%, aunque en el caso de los pacientes con antecedentes de convulsiones idiopáticas o inducidas por la medicación el riesgo es más elevado.
Efectos alérgicos y dermatológicos: Las reacciones alérgicas cutáneas son bastante frecuentes con los antipsicóticos de primera generación. Para remitir estos síntomas suele ser eficaz interrumpir el tratamiento farmacológico o administrar un antihistamínico.
Efectos hepáticos: Con este tipo de medicamentos también se produce elevación de la concentración de las enzimas hepáticas e ictericia colestásica. Se ha observado aparición de ictericia entre el 0,1 y el 0,5% de los pacientes que toman clorpromazina. Este efecto secundario suele producirse durante el primer mes tras el inicio del tratamiento, y generalmente requiere la interrupción de éste.
Efectos oftalmológicos: Pueden aparecer retinopatías pigmentarias y opacidades corneales con la administración crónica de medicamentos de baja potencia, como la clorpromazina, en particular en dosis altas (p. ej. más de 800 mg/día de tioridazina -ya retirada del mercado-). Por esta razón, los pacientes mantenidos con estos medicamentos deberían someterse a exámenes oftalmológicos periódicos.
Efectos hematológicos: La administración de medicamentos antipsicóticos puede causar efectos hematológicos, como la inhibición de la leucopoyesis. Este tipo de efectos incluye leucopenia benigna y agranulocitosis, que es más grave. La clorpromazina es la causante de la leucopenia benigna en más del 10% de los pacientes y de agranulocitosis en el 0,32% de ellos.
Efectos cardiovasculares: entre los efectos cardiovasculares destacan la hipotensión ortostática, la taquicardia y la prolongación del intervalo QT con haloperidol.
Aumento de peso: el incremento de peso se produce con la mayor parte de antipsicóticos; hasta un 40% de los pacientes tratados suben de peso.
Evitar el aumento de peso debería ser una prioridad, ya que muchos pacientes tienen dificultades para adelgazar. Cuando se observe que el afectado ha ganado peso, hay que señalarle la necesidad de ponerse a dieta y hacer ejercicio, o de derivarle a un dietista.
Efectos sobre la función sexual: La disfunción eréctil aparece en el 23-54% de los hombres. Otros efectos consisten en alteraciones en la eyaculación en el hombre y en pérdidas de la libido o anorgasmia en ambos sexos. Además, con determinados antipsicóticos se ha observado eyaculación retrógrada, debida probablemente a los efectos antiadrenérgicos y antiserotoninérgicos. La reducción de la dosis o la interrupción del tratamiento normalmente conllevan una reducción o desaparición de los síntomas. Si no puede reducir la dosis ni es posible administrar un fármaco alternativo, puede recurrirse a la yohimbina o la ciproheptadina.

Interacciones farmacológicas de los antipsicóticos de primera generación (convencionales)

Pueden producirse numerosas interacciones farmacológicas que tengan efectos clínicos importantes en los pacientes que reciben tratamiento con medicación antipsicótica. Determinados antidepresivos heterocíclicos, la mayor parte de los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), algunos beta-bloqueantes y la cimetidina pueden aumentar la concentración plasmática de antipsicóticos e incrementar los efectos adversos. Por otro lado, los barbitúricos y la carbamazepina disminuyen la concentración plasmática al actuar sobre las enzimas del citocromo P-450
B) Antipsicóticos de segunda generación (o atípicos)
En la actualidad están autorizados en el Estado español los siguientes anti-psicóticos de segunda generación: clozapina, risperidona, olanzapina, paliperidona, sertindol,
Efectos adversos frecuentes de los antipsicóticos de segunda generación
  1. Síndrome metabólico
    Se denomina síndrome metabólico al conjunto de obesidad, hiperglucemia e hipertrigliceridemia, normalmente asociado a resistencia a la insulina. Estos factores pueden conducir a cardiopatía isquémica, diabetes y enfermedades por sobrepeso
    4.1.2. Otras medicaciones coadyuvantes
Si bien la GPC del APA  recoge la utilización de otros medicamentos para potenciar la eficacia terapéutica de los antipsicóticos y para tratar los síntomas residuales, incluyendo los positivos, negativos y afectivos, se discute la eficacia de estos tratamientos en pacientes con esquizofrenia.
  1. Litio
    Existe alguna evidencia científica de que el uso de las sales de litio como potenciadores del tratamiento antipsicótico en pacientes con sintomatología resistente puede incrementar la respuesta antipsicótica y reducir los síntomas negativos y afectivos. La dosis de litio es la necesaria para obtener una concentración hemática de 0,8-1,2 meq/l.  Los efectos adversos del litio son: poliuria, polidipsia, aumento de peso, alteraciones cognitivas, temblor, sedación, deterioro de la coordinación, alteraciones gastrointestinales, caída del pelo, leucocitosis benigna, acné y edemas. La combinación de un tratamiento antipsicótico con litio puede producir confusión y desorientación y aumentar la probabilidad de que se produzca un síndrome neuroléptico maligno.
  2. Benzodiacepinas
    Pueden tener utilidad en la fase aguda como coadyuvantes en la agitación psicótica, pudiendo reducir la dosis de antipsicótico.
    Sus efectos adversos incluyen sedación, ataxia, deterioro cognitivo y en algún paciente desinhibición conductual. Se debe controlar el posible abuso de estos fármacos, y tener en cuenta que la combinación de éstos con clozapina y levopromazina puede ser peligrosa y estar contraindicada.
  3. Anticonvulsivantes
    Pueden ser eficaces como coadyuvantes de los antipsicóticos en pacientes con anomalías del electroencefalograma indicativas de una actividad convulsiva y en pacientes con conducta agitada o violenta.
    No se recomienda el uso de carbamacepina con clozapina por el potencial de ambos fármacos de producir agranulocitosis.
    Carbamacepina y valproato reducen las concentraciones hemáticas de los antipsicóticos como consecuencia de la inducción de las enzimas hepáticas.
  4. Antidepresivos
    Los ISRS se utilizan sobre todo cuando se produce una depresión post-psicótica, difícil de distinguir de los síntomas negativos provocados por los antipsicóticos de primera generación. En conjunto, las pruebas a favor de la eficacia de los antidepresivos en el tratamiento de los síntomas negativos son muy moderadas y la mayor parte de los estudios se han realizado con antipsicóticos de primera generación. En dos estudios se comprobó la eficacia de fluvoxamina y clomipramina en el tratamiento de los síntomas obsesivo-compulsivos en la esquizofrenia.
    Además, la depresión mayor y el trastorno obsesivo compulsivo son condiciones comórbidas frecuentes en pacientes con esquizofrenia que podrían responder a los antidepresivos. Sin embargo, algunos antidepresivos (aquellos que inhiben la recaptación de catecolamina) pueden potencialmente mantener o exacerbar síntomas psicóticos en algunos pacientes.

Se puede afirmar que la toma de decisiones sobre el uso de medicación antipsicótica parece condicionada por tres factores principales. En primer lugar, la similitud de los efectos terapéuticos de los dos grupos de antipsicóticos frente a los síntomas positivos, que son los que habitualmente conducen al inicio de un tratamiento farmacológico. En segundo lugar, los diferentes perfiles de efectos adversos que pueden producir a los que se atribuye ser la causa principal de la falta de adherencia al tratamiento. Y finalmente, las preferencias del paciente hacia un fármaco o presentación determinados. Todo ello confirma la necesidad de individualizar el tratamiento antipsicótico.

lunes, 13 de enero de 2014

・・・・・☆☆ミ(o*・ω・)ノ Stairway To The Skies `*:;,.★ ~

Bueno, hoy es el turno de otra personita especial~
Ella es chula y muy buen persona, un poquito confundida pero super mega hiper chula B|

Siempre es la primera en ayudar, en salvarme la vida cada que olvido un deber, una niña muy inteligente, claro que hemos tenido muchos desacuerdos~ lo sé, pero es porque de una extraña manera somos similares en un punto y es eso lo que nos lleva a no coincidir pero a la vez nos vuelve mejores para alcanzar nuestros sueños.

Tal vez, no la traté en primero y en segundo comenzó a volverse parte de mi grupo para que luego en tercero, ser parte del grupo de mis amigas, de las personas importantes, siempre tan divertida y algo inocente, a veces, porque coje más rápido el chiste que la Mile.

Siiii, estamos hablando de Zulay c: , sé que podemos pelear y todas las tonteras que ocurran, pero de verdad te considero mi amiga, una gran amiga, te adoro, te amo tal y como eres, eres una gran persona, de buen corazón sólo que a veces intentas todo tu sola, te tiras lo mayor y es allí cuando las cosas salen mal, deja que te ayudemos y que demostremos a las demás que no sólo es una, sino que somos todas allí aportando, que tu opinión si vale.

En este tiempo que te he conocido, sé que eres agradable, alguien con quien se puede conversar, yo te adoro mucho y por eso, aunque cualquier tontería pase no dejaría de ser tu amiga Zulay, puede que me aleje pero si me necesitas, te ayudaré con mucho gusto, gracias por ayudarme cada vez que has podido, de tenderme una mano cuando nadie más podía.

Eres alguien muy risueña, alguien muy linda e inteligente, no te pierdas en el amorsh haha, eres una niña muy capaz.

Sabes...escogí el nombre de esta entrada como "Stairway To The Skies" Por una canción, que habla de una persona que pensó que moriría, pero sueña con una escalera al cielo, de esa escalera baja un ángel a tenderle la mano, pero el ángel se va y termina con la frase:



 "Cada vez que me necesites, siempre estaré un paso detrás de ti"



Eres como un ángel Zulay, alguien que está allí para los demás, por eso escogí este nombre para la entrada que te dedicaría, eres alguien incondicional, lo sé, valoro eso y tu esfuerzo en que las cosas salgan bien.

No cambies tu forma de ser, porque así eres tú y eso te hace muy especial, eres muy adorable y aunque a veces me dan ganas de darte un buen zape haha, pero enserio, de verdad eres una linda persona. Sabes, perdóname enserio si alguna vez te he hecho sentir mal tanto con las cosas que he dicho como mis actos, nunca he medido mis palabras y a veces no sé como hacerlo, por eso en este ultimo tiempo me he vuelto más callada y prefiero, escuchar.

Así que zulay, cada que me necesites, estaré para ayudarte, te adoro muchísimo.


Gracias enserio, por ser mi amiga incondicional




"En los momentos felices mi amigo acude únicamente
si lo llamo; pero,  en los tristes, viene sin que se lo pida"



"Un amigo es un regalo que te haces a ti mismo"



"Alguien irrumpe en tu vida como si fuera el destino.
Se ríe de lo que tu te ríes, y ve el mundo como lo vez tú.
Así es la amistad"



P.D: Disculpa, aquí no tengo fotitos de nosotras dos :c

TE ADORO ZULAY, ERES UNA GRAN PERSONA CON UN GRAN CORAZÓN :* TE AMODORO.

Atte para Zulaybertha y su marca del Zorro:

Sashi :*




domingo, 12 de enero de 2014

Merry Making~ヽ(*^ー^)人(^ー^*)ノ

Esta es la segunda entrada que le dedicaré a alguien.

Bueno, es alguien que conocí por primera vez en la columna, en un día lunes, le pregunté que hora era y luego le decía que me estaba aburriendo con todo lo que decían.
Luego volví ah hablar con ella cuando yo llevaba el celular y quería abrir su facebook haha, todo el trámite que hicimos para ver la contraseña o cuando quiso averiguar como se escribía su nombre en japones.
Es alguien increíble, alguien en quien puedo confiar y a quien le cuento absolutamente todo, creo que mi mundo no sería feliz sin ella.

Es como mi mano derecha, siempre tan alegre y está allí para aconsejarme, para escucharme, es alguien que sin duda puedo llamar AMIGA pero más que amiga, HERMANA.

Desde primer año de bachillera la conocí y creo que ha sido aquel pilar que ha estado allí para ayudarme cuando más lo necesité, cuando más triste estaba me preguntó que sucedía y me ayudó a sentirme mejor.

Mi vida no sería lo mismo sin tí, mi Mile <3 , eres una gran persona con un noble corazón y el aura que irradias es hermoso, eres una chica muy inteligente y capaz de todo, sé que te espera un gran futuro y que te esperan grandes cosas.
Eres una de esas estrellas que nunca quisiera que se apagaran, eres muy importante en mi vida y hemos compartido muchas cosas juntas en todo este tiempo, creo que tu me conoces bastante, más de lo que yo me conozco a mi misma.

La verdad, nunca quisiera perder tu amistad porque eres una de las dos personas que ni una sola vez me han defraudado, siempre estas allí para escuchar y para aconsejar, gracias enserio por todo Mile, por ser como eres, un encanto de persona, espero que jamás NADIE se atreva a borrar tu sonrisa que te hace tan única :3

Gracias por todo Mile, pro ser quien eres y nunca cambies, porque no tengo palabras para decirte todo lo maravillosa que eres y lo importante que es tu amistad para mi :3



"Amigo es aquel que -aun a costa de perdernos-
nos ayuda a ir en pos de nuestros sueños"



"La amistad es maravillosa porque es libre: no espera
nada, lo da todo y se la encuentra sin buscarla"



"Un verdadero amigo se ríe de tus chistes aunque
no sean muy buenos y comparte tus problemas
aunque no sean muy serios"


ERES UNA GRAN PERSONA, NUNCA CAMBIES MILE, TE ADORO COMO ERES.

TE QUIERO MUCHÍSIMO.



Atentamente con muchísimo cariño para Milena:

Sashi <3


sábado, 11 de enero de 2014

Mi punto de vista acerca del Rol~

Rol, cuantas veces me he hundido en el maravilloso mundo del rol.
Llevo...toda mi adolescencia en el ¿qué son? ¿6 años?
Ponerme a ver aquel video sobre el rol, me hace pensar mucho en lo que he vivido todos estos años, siempre me dicen que es un juego, que es algo dañado, algo que no debes tomarte a pecho pero yo como usser, no puedo darles la razón, el rol me ha hecho llorar, me ha hecho sufrir, me ha hecho reír y sentir alegría, no es algo que no tiene importancia...
Comencé en él como una forma de entretenerme, de escapar, de alguna forma de inventar una bella historia, pero de a poco se volvió algo, cotidiano, algo del día a día.
Es verdad que cuando comencé el rol Yaoi, como Kai, no sabía que hacia y por eso me toco una partner loca, pero la verdad, a pesar de dejarlo un año después de eso, era inevitable para mi, que debía regresar de una u otra forma, el mundo del Rol le dio alas a mi imaginación, me dio alas a explotar distintas facetas de mi personalidad, a encontrar gente increíble y con diversidad de culturas.
He llorado como Kai, como Aoi, como Kamijo, he sufrido y he tolerado un sin fin de cosas que de verdad duelen, porque no es que te las tomes a pecho, se convierte en parte de tu vida, parte de ti. El rol es parte de mi vida y me jode que digan que yo soy una persona que se toma muy a pecho lo que le digan los otros personajes.

BOLUDO! Estas poniendo tus sentimientos, nadie puede recrear a la perfección a una persona que admira, porque no la has visto de frente, no la has tratado y quien sabe si en las entrevista son un pantallazo -no quiero decir que así sea-, está tu personalidad puesta en aquel personaje, mis personajes, no son iguales, no intento de imitar a la perfección a la persona real, no puedo, aunque así deba de ser, no soy de esas personas que escriben 20 líneas porque prácticamente el rol se ha vuelto manipulado por gente perfeccionista, osea, si se ve bonito, interesante...pero ¿Por qué tanta regla? ¿Qué pasó cuando el rol solo era por diversión? ¿Tantas líneas hace que tu personaje valga la pena?

QUE TE FOLLEN

yo por mi parte, no he cambiado casi nada mi estilo de rolear, es bastante básico, con lastima llego al susodicho nivel "Medio", practicante mi mejor amiga fue una de esas que se creía la mamá de tarzan al criticar como le daba la gana el estilo de rolear de los demás~ ¿le metes los cachos a la pareja de tu rol sólo porque no rolea como tu quieres? Boluda, por eso tus roles son una reverenda mierda

¿Qué mierda con las temáticas?

Me aburren, hahaha estaba tan acostumbrada al rol de MetroFlog, al Msn, aun conservo un Rol en Msn y me encanta, en facebook, me tocó porque me invitaron y en Metrglof se perdieron los roles, tengo tantas emociones encontradas y revueltas.

Tantas historias escritas en Internet y no por ser pura ficción no es que no duelan, duelen y mucho, me he deprimido, he disfrutado de las bellas historias de amor que han tenido mis roles...

He sido una rata como Aoi

He sido tan Amable como Kai

Tan frío como Uruha

Tan romántico como Kamijo

Tan infantil como Ruki

e Incluso tan indiferente como Ruka

Pero...supongo que las ussers de ahora, no les interesa nada más que un buen y estúpido lemon, osea, que ussers más putas y urgidas, a mi no me interesa el lemon, me importa la historia, el compartir entre personajes...si quieres follar, anda al motel por Dios, cuando mis roles aprecian a alguien, soy yo quien está apreciando al personaje que está hablando conmigo, son mis sentimientos, soy yo quien muy en el fondo, sin conocer o saber nada de quien esta detrás de un monitor, aprecia que le contesten de alguna forma y que de alguna forma me hagas el día al responder.

Tengo tanta frustración, cada vez que alguien le da poca importancia a un rol...

Me da rabia y ganas de llorar.

Eso es todo lo que diré por ahora